Estimulación del lenguaje por parte de los padres

Quién no le ha repetido a su hijo Pa-Pá, Ma-Má en sus primeros balbuceos, pero parece que una vez que el niño consigue decir esas dos primeras palabras que para nosotros son tan importantes, nos olvidamos de estimular su lenguaje y enseñarle a hablar.

Los años cruciales para el desarrollo del lenguaje infantil son los que van desde los 18 meses hasta los cinco años, es en este periodo cuando los padres pueden ser una figura crucial en la coordinación del lenguaje y no debemos caer en muchos de los errores que se cometen por desconocimiento.

Errores que perjudican el aprendizaje del lenguaje

• El niño debe de ir poco a poco dejando la comida blanda, purés, papillas y combinarla con alimentos sólidos que le permitan practicar la masticación y preparar los músculos de su boca para intervenir en el lenguaje.

Sabemos que a veces cuesta porque para el niño es más cómodo tragar un alimento blando, pero debes de ir introduciéndole los sólidos, comenzando por aquello que más le gusta e ir incorporando lo demás.

• Cuidado con el chupete, en una primera etapa puede ser un consuelo para tu pequeño, pero llega un momento que su uso prolongado puede traer consecuencias físicas como la malformación del paladar.
• Los niños tienden a pedir las cosas señalando, debes decirle que te lo diga con la palabra apropiada, si la desconoce, se la enseñas. No importa que al principio la pronuncie mal o su expresión sea incorrecta, la irá corrigiendo con tu ayuda, pero se debe de acostumbra a pedir las cosas por su nombre y tú te debes de acostumbrar a no responder a los gestos.
• Hay que tener paciencia con el ritmo del niño, no le interrumpas cuando te cuente algo, ni termines sus frases por él. El niño debe sentir que aquello que nos cuenta nos interesa y que estamos muy a gusto escuchándole.
• El niño va a repetir lo que oiga, por ello, vigila tu propio lenguaje, no le hables como a un bebé utilizando diminutivos ni repitiendo palabras erróneas que él haya usado por equivocación. Háblale como a otro adulto, con un lenguaje claro, despacio y sin gritar, de esta forma le ayudaremos a desarrollar su habla y su progreso intelectual.
• Al corregirle no debes decirle “eso no es así” o “lo has dicho mal”, con ello solo recibirá una serie de mensajes negativos, cuando el niño construya una frase incorrecta, respóndele con ella bien construida “nene, parque” “¿Pedro quiere ir al parque? Pues ahora vamos”
• Cuando consiga decir algo que le haya costado aprender, debemos felicitarle y celebrarlo, para él ha sido un gran esfuerzo.
• Nunca reírse de las incorrecciones que pudiera tener en su lenguaje.
• Es importante dialogar con nuestros hijos, enseñarles a pensar antes de hablar y a mirar a los ojos a la persona con la que se habla. Si tú no le interrumpes, él no lo hará y será más fácil el escucharos los unos a los otros en una conversación.
• La televisión puede ayudar en su adquisición de lenguaje porque aprende mucho vocabulario nuevo, pero siempre con supervisión de un adulto, no permitas que tu hijo pase excesivas horas delante del televisor, ni que sea el sustituto de juegos o del tiempo libre.

Habla con tus hijos, pregúntales qué han hecho en el colegio, qué opinan de un tema, dales confianza para que te cuente sus cosas. Los padres podemos enseñar a hablar y enseñar a escuchar.