La televisión para menores de 3 años

A partir del 1 de noviembre, las cadenas francesas no podrán editar, difundir ni promover programas destinados a niños menores de 3 años, según una decisión del Consejo del Audiovisual de Francia.

Esta decisión se basa en que ver la tele a esa edad puede acarrear "trastornos del desarrollo", tales como pasividad, retraso en el habla, agitación, problemas de sueño y concentración o dependencia de las pantallas.

Esta noticia nos tiene que hacer reflexionar muy seriamente sobre el uso que le damos a la televisión. Los niños no la necesitan para su buen desarrollo, es totalmente prescindible. Además su abuso empobrece la salud familiar. En vez de leer en familia, hablar en familia, compartir el silencio en familia, usamos la televisión para, ¿...?

En todo hogar hay una o varias televisiones y casi siempre encendidas. Muchas veces no hay nadie delante mirándola, pero hace compañía. Lo malo es que mientras está encendida los más peques van mirando embobados imágenes que no entienden, y aunque no miren, van escuchando de forma pasiva frases, expresiones en contextos que no entienden pero que sí absorben.

Además la pantall

a tiene el efecto de atracción, los peques no pueden dejar mirar las imágenes rápidas, con música, los cambios, los ritmos, las voces....

Hay programas educativos como los Baby Einstein que están diseñados para estimular y divertir a los más pequeños sin hacerles daño. Yo se los pongo a mis peques en determinadas ocasiones (y me gustan bastante), pero sí es cierto que les favorece más jugar con la arena, cubos y tobogán en el parque que asimilar imágenes de forma pasiva (bueno, su cerebro no está nada pasivo!!).

Lñegar a prohibir ver la televisión para salvar la salud de los más pequeños, nos tiene que llevar a plantearnos ¿qué estamos haciendo con ella?

Vía planeta educativo