Estaba en mi consulta con mi pacientita cuando esta me pidió salir. Al volver vi que venía mostrándome algo con una gran sonrisa y vi que en las manos llevaba el cuento de "El planeta de los mimos". Habitualmente este cuento lo tengo en la mesa de la sala de espera. Ella casi nunca pide nada, así que me pareció una buena idea leerlo juntas. Yo hacía de robot y ella de niño, y viajando a través del cuento, descubrimos que existen distintos tipos de besos, caricias y abrazos y también pudimos hablar sobre cuales eran nuestros favoritos y porque nos gustaban más. También lo pasamos muy bien con las canciones, cantarlas y recordar sus letras fue muy divertido. Había un par que no conocíamos y ella las buscó en internet. Ese día, mi pacientita salió contenta, relajada y con el aprendizaje que cuando pide hacer alguna actividad que le apetece lo puede pasar en grande. Resultó ser una sesión de mucha ternura y afecto, y las dos aprendimos a cuidarnos a través de los abrazos, las caricias, los besos y, por supuesto, las canciones! Creo que este cuento es un buen recurso para usar tanto en terapia como en casa con nuestros hijos.