Pautas para actuar en positivo cuando el niño nos reclama desde su cama
El niño pequeño, puede pasar temporadas que duerma tranquilo en su cuna o cama, y otras en cambio, que se despierte constantemente reclamando a los padres. Se ha despertado y le cuesta volverse a dormir por si solo, o tal vez le está costando conciliar el sueño porque se siente solito, con lo que puede ser habitual oir demandas tales como : ¡mama ven!, ¡tengo sed!, ¡tengo miedo!, ¡no quiero dormir!
¿Hemos de acudir siempre?
Mi respuesta es sí, hemos de acudir para tranquilizar y atender su necesidad emocional.
Para el niño no es fácil este aprendizaje se siente solito en la oscuridad de su cama y necesita asegurarse que no está solo, que sus papás están cerca y que no han desaparecido. Así pues hemos de acudir siempre que nos reclame porque así evitaremos que aumente su angustia.
¿Cómo debo actuar?
Acudirás sólo para tranquilizarlo, y no para acceder a sus peticiones. Cada vez que acudas ten en cuenta lo siguiente:
- Acude con el objetivo de tranquilizarlo, sin cogerlo en brazos y sin sacarlo de su cama. Lo tranquilizas con tu presencia, con tu dulce voz y con mensajes cortos, claros y siempre positivos.
- No le hables fuerte, mejor le hablas cariñosamente como un susurro y que a la vez tu voz transmita firmeza y que estás tranquilo.
- Evita enfadarte con tu hijo o hija en estos momentos. Sé que es difícil pues te puede llamar 10 veces en los inicios de esta etapa, pero si tu hijo siempre recibe un mensaje firme, positivo y corto, en breve habrá aprendido. No es momento para enfadaros, así que prepárate para tener más paciencia durante unos días.
- No enciendas la luz, haz visitas cortas y no accedas a sus peticiones ni tampoco las discutas.
- Háblale siempre en positivo. Ante sus peticiones o quejas no hay enfado ni discusiones, simplemente respuestas o frases afirmativas:
- “no tengo sueño", le puedes responder, “tranquilo mi vida, el sueño pronto vendrá y verás que bien vas a dormir. Buenas noches” Un besito y te vas de la habitación.
- “Mamá tengo miedo”, "tranquilo cariño tu muñeco mágico te protege; o te dejo la puerta abierta para que oigas que estamos cerca de tu habitación;o piensa en colores bonitos cuando cierres los ojos. Felices sueños”. Un besito y te vas.
- “Tengo sed”, "ahora no es momento de beber, así podrás dormir mucho mejor. Que duermas bien. Un besito y te vas. (Te recomiendo que antes de acostarlo le des agua y le digas, “a partir de ahora ya no se bebé más agua hasta mañana).
- “¿Me lees más cuentos?” , "Mañana te leeré un cuento, esta noche ya te he leído el de las buenas noches. Te quiero cariño, felices sueños”.
Refuerzos positivos
A los niños les motiva que sus padres estén contentos y se sientan orgullosos de ellos. Así que dile a tu hijo lo contenta que estás porque está aprendiendo a dormir solito. No se lo digas solo en el momento previo a meterse en la cama, díselo también en otros momentos del día.
Aprovecha las visitas de los abuelos o demás familiares o amigos para contarles que tu hijo está aprendiendo a dormir solito, que ya es mayor y que siempre va a dormir muy bien. Asegúrate que tu hijo está oyendo tus palabras.
Nunca, verbalices las dificultades ni los aspectos negativos delante de tu hijo pues dificultarán su aprendizaje. Los niños están muy pendientes de todo lo que sus padres dicen y se identifican con estos mensajes. Ahora es mejor que se identifique con un mensaje positivo de ¡sí dormirá bien! (y no te oiga decir que mal duerme, no para de llamarnos, se despierta un montón, etc).
También les motiva ser mayores y ver que consiguen cosas. El póster Buenas Noches les ayuda a reforzar sus logros con las pegatinas y con subir de nivel.
Ten paciencia, si siempre recibe de ti el mismo mensaje de confianza y seguridad podrá superar esta etapa quedándose dormido solito.
Felices Sueños...
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Escrito por:
Pedagoga, Terapeuta infantil, Orientadora familiar, fundadora de Edúkame