Después de un tiempo durmiendo con los padres, no quiere dormir solo
Desde Edúkame os hemos hablado del colecho, los niños que duermen con los padres, esto es una opción que debéis decidir vosotros ya que tiene sus ventajas e inconvenientes, pero hoy queremos tratar el problema que se nos plantea cuando hemos dejado dormir a nuestros hijos un tiempo en nuestra cama, bien sea porque estaban malitos o porque queríamos compartir el lecho con ellos y ahora queremos que ocupen su espacio y duerman en su habitación.
Para un niño la hora de irse a la cama es el momento en que se le terminan los juegos y la diversión y si ha estado compartiendo la cama con sus padres y ahora le obligáis a dormir solo, le supondrá también el cese de la convivencia con sus progenitores durante unas horas, por lo que la hora de irse a dormir se puede transformar en una batalla campal.
Dormir cada uno en su cama
Debemos explicarle a nuestro hijo que debe acostumbrarse a dormir en su cama y en su dormitorio, siempre diciéndoselo de forma firme, pero tierna.
Establecer un ritual a la hora de irse a la cama, acompañarle a su habitación, ayudarle a ponerse el pijama y a acostarse, contarle un cuento, darle un beso de buenas noches, después dejarle solo.
Para que se vaya acostumbrando poco a poco, decirle que volveréis en un rato a ver cómo le va, los primeros días volver en pocos minutos, después ir alargando el tiempo hasta que finalmente se quede dormido él solo sin necesidad de vuestra presencia.
El objetivo es que el niño se quede solo y aprenda a dormir solo y aunque los primeros días llorará y os llamará, con este sistema aprenderá que cada uno tiene su dormitorio.
Puede que el pequeño utilice algunas estrategias, como decir que está enfermo o coger tal rabieta que le haga vomitar, no cedáis al chantaje, cambiarle, arroparle, pero siempre dejarle en su habitación.
Ayudas externas
Podéis motivar a vuestro hijo haciendo más atractivo su dormitorio, lo podéis decorar a su gusto, colocar dibujos que él haya hecho o fotos de vosotros y de sus hermanos.
Hacerle entender que el dormir solo es una prueba de que ya es mayor, por las mañanas cuando se levante alabar el que haya dormido toda la noche en su habitación y si lleva muchos días seguidos sin dormir con papá y mamá premiarle de alguna forma por sus logros.
Y recuerda que un buen descanso va a influir en el rendimiento diario de tu hijo.
