Buscando los huevos de Pascua
Estamos en plena Semana Santa que terminará con el domingo de Pascua, este día existe una tradición que nos ha llegado de países como Alemania o Estados Unidos, pero que ya hemos hecho nuestra y es la de los huevos de Pascua.
Tradición de los huevos de Pascua
Antiguamente los huevos que no se comían durante la Cuaresma por motivos religiosos, se protegían con una capa de cera y se regalaban el domingo de Pascua en la puerta de la Iglesia tras la misa de Resurrección.
De estos huevos de colores se pasó a los huevos de chocolate y la tradición tomó un tinte infantil al esconder las preciadas piezas en el jardín y hacer que los niños las buscasen. La explicación que se daba era que el conejo de Pascua escondía los huevos de chocolate para que ellos los buscasen y así este personaje se incorporó a esta tradición.
Son costumbres muy divertidas que merecen vivirse cuando se tienen niños, puedes adquirir unos huevos de chocolate decorados con papeles de colores y esconderlos por tu casa, el domingo por la mañana pedirles a tus pequeños que los busquen diciendo “frío, frío” cuando estén lejos del escondite o “caliente, caliente” cuando estén cerca.
Manualidades para los huevos de Pascua
En estos días de vacaciones puedes aprovechar para hacer divertidas manualidades con tus pequeños, podéis decorar los huevos previamente cocidos o hacer otras divertidas artesanías como las que nos propene la página Mr. Printables
- Vistiendo a los huevos de Pascua: después de pintarles unas divertidas caras también podemos hacerles un vestuario a nuestros huevos de Pascua. Descargate aquí los trajes de tus personajes y forma la Familia Pascual.
- Cajitas del conejito de Pascua: quieres que tus hijos además de los huevos encuentren pequeños tesoros como caramelos u otras chucherías, imprime y recorta estas cajas con forma del conejito de Pascua, verás que ilusión les hace cuando las encuentren.
- Un camión para nuestro huevo de Pascua: muchas veces los huevos son tan bonitos y con esos papeles tan brillantes que dan pena comérselos enseguida, los niños quieren guardarlos para enseñárselos a sus abuelos o a sus amigos. Podéis imprimir este camión, recortarlo y montarlo entre los dos, será un buen soporte para que el huevo aguante y no se rompa antes de que lo vean los demás. Después a abrirlo y comerlo entre todos ¡Uhhmmm qué rico!
