Diez consejos para la seguridad del niño en la piscina
El verano ha llegado y el calor se ha hecho presente en gran parte de nuestro territorio, en estos días buscamos sitios frescos y a la sombra para disfrutar de nuestras vacaciones y refrescarnos, nada más refrescante que un buen baño en la piscina.
La piscina es un lugar muy divertido para nuestros hijos, allí disfrutan al aire libre, se relacionan con otros niños y aprenden a nadar, pero también es un lugar que entraña muchos peligros si no se tiene una vigilancia especial hacia ellos.
Diez consejos para la seguridad del niño en la piscina
• No permitáis que los niños se bañen solos, meteros en el agua con ellos, será un momento para disfrutar en familia y en el que vosotros le proporcionéis seguridad.
• Si los niños no saben nadar bien, ponerles manguitos o un chaleco de seguridad antes de darse un chapuzón.
• Cuidado con los lanzamientos de cabeza, puedes enseñar a tus hijos a lanzarse de esta forma, pero advirtiéndoles siempre que la profundidad debe ser la adecuada y no deben lanzarse de cabeza en la parte menos honda.
• Los bordillos, las escaleras y los toboganes resbalan y pueden caerse, pídeles que no corran por esas zonas y cuando vayáis juntos por el borde de la piscina sujétale de la mano.
• Después de comer deben guardar entre 1 hora y media y 2 horas para la digestión, entretenlos en ese rato con algún juego o juguete para que no se les haga demasiado largo el tiempo, una baraja de cartas infantil puede proporcionar un rato muy divertido. Si tu niño es un bebé todavía, busca una sombra donde pueda echar un ratito de siesta.
• Recomiéndale que después del periodo de digestión entre despacito en la piscina, no de golpe y enséñale tú con tu ejemplo a hacerlo. Si se tira de golpe además de hacerse daño puede tener un corte de digestión.
• Tanto si la piscina es pública o privada, ayúdale a cuidar las zonas comunes, indícale dónde puede tirar los papeles u otros desperdicios, es importante que desde pequeño el niño se acostumbre a respetar las instalaciones y dejarlas limpias.
• En caso de que tu pequeño se haga daño acude al servicio médico que hay en todas las piscinas, ellos sabrán calmarle y tendrán apósitos especiales que no se quitan con el agua.
• Protege su piel con cremas indicadas para niños y estate pendiente de que beba mucha agua para que no se deshidrate con el calor.
• Si durante el curso eliges como actividad extraescolar natación, en verano tu hijo se defenderá muy bien, sino muchas piscinas ofrecen cursillos de verano donde los niños aprenderán rápido y con todas las garantías.
Si seguís estos pequeños consejos estaréis educando a vuestros hijos para que se responsabilicen y hagan del baño una experiencia gratificante evitando sustos y riesgos.
Y ahora ¡Todos al agua!