La obesidad es la epidemia del siglo XXI
El sobrepeso y la obesidad son prevenibles aunque la mayoría de las prácticas terapéuticas tienen como fin la curación. Un niño obeso tiene más probabilidad de sufrir diabetes y enfermedades cardiovasculares que uno que no lo sea.
En los últimos años el número de niños con obesidad infantil se ha triplicado, por ello sería necesario que los padres enseñásemos a nuestros hijos a llevar un estilo de vida saludable.
Nutrición saludable en lactantes
- La mejor lactancia es la lactancia materna, previene muchas enfermedades entre ellas la obesidad infantil.
- Si tu hijo toma leche artificial, no le añadas al biberón ningún tipo de azúcar.
- Cuando tu hijo comience a comer las primeras papillas y purés, no le obligues a vaciar el plato si no quiere comer más, su organismo regulará su propia ingesta de calorías.
Nutrición saludable en niños
- Antes de acudir a la escuela el niño debe tomar un desayuno apropiado en el que haya cereales, lácteos y fruta.
- Fomenta la ingesta de frutas y verduras
- Reduce los platos con alimentos precocinados
- No sustituyas el agua por refrescos
- Utiliza el tiempo de la comida para hablar con tus hijos, una comida en familia es mejor que una comida ante el televisor.
- Dale a tus hijos información sobre los peligros de la obesidad para que puedan elegir opciones alimentarias adecuadas.
Actividad física
Los niños necesitan hacer un mínimo de 60 minutos diarios de actividad física para mejorar sus funciones cardiorrespiratorias, musculares y reducir el riesgo de obesidad.
Alienta a tu hijo a hacer deporte u otras actividades como montar en bicicleta o practicar senderismo. Si crees que por sus estudios no tiene tiempo, por qué no le animas a ir al colegio andando en vez de en coche.
Aprovecha los fines de semana para practicar actividades al aire libre en familia, eso además de ser bueno para su organismo reducirá el tiempo de inactividad que pasa ante la televisión o el ordenador.
