Cómo tienen que ser las lámparas de un dormitorio infantil
Tu hijo ya ha crecido y ahora quieres que tenga su propia habitación. El dormitorio infantil tiene que ser funcional y seguro, tener un espacio para que pueda jugar y una mesa donde pintar, hacer manualidades y en un futuro poder estudiar.
Los padres nos ocupamos de elegir los muebles, ponerle una decoración alegre, vigilar que no se pueda pillar las manitas con los cajones, ni con las puertas, y las lámparas ¿has pensado en las lámparas que instalarás en esa habitación?.
Lámparas infantiles seguras
Los niños son curiosos por naturaleza, tienden a tocarlo todo y a descubrir el espacio que les rodea experimentando con él, por eso debemos siempre tener cuidado con los materiales que se encuentren presentes en su dormitorio, donde seguramente pasará largos ratos jugando, a veces sin que tú estés presente.
Cuando elijas qué luces para poner en su cuarto, fíjate que lleven todos los sellos de control, de esa forma sabremos que han pasado todas las pruebas de seguridad.
Las lámparas infantiles deben resistir los juegos de gran actividad, un golpe con una pelota o un choque con un juguete será lo más habitual, también deben ser seguras ante las manitas de esos futuros científicos que se afanan por desmontar todo lo que encuentran, de este modo evitaremos accidentes e imprevistos.
Ten especial cuidado en observar que las pantallas no se calienten demasiado y que las bombillas no sean accesibles con facilidad y sin una herramienta.
Si la lámpara es de mesa o puede estar al alcance del niño, mejor que elijas una bombilla con un voltaje bajo y procura que los cables no sean demasiado largos para evitar que se puedan enredar en algún juguete o en su cuerpo.
Cubre los enchufes con protectores de seguridad que puedes adquirir en negocios de electricidad y tiendas de accesorios infantiles.
Siempre es mejor poner una lámpara segura, que otra que tenga un diseño infantil muy gracioso, pero que no nos proporcione suficiente tranquilidad.
Imagen: Moda y hogar