¡Adivina, adivinanza!
Si tienes un largo trayecto por delante en coche o en autobús, una buena idea para entretener a tus hijos es contar adivinanzas.
Estos dichos populares donde se debe adivinar algo a modo de pasatiempo, son a la vez juegos de ingenio con los que, además de entretenerse y divertirse, los niños aprenderán nuevo vocabulario que fomentará su aprendizaje.
Adivinanzas para niños
Con este juego puede participar toda la familia, uno propone el acertijo y los demás tratan de encontrar la solución.
• Muchas damas en un agujero y todas visten de negro: el hormiguero
• Hay una señora con un solo diente, que hace correr en mi pueblo a todita la gente: la campana
• Fui a la tienda y lo compré negrito, llegué a mi casa y se puso coloradito: el carbón
• Vuela sin alas, silba sin boca, no se ve y tampoco se toca: el viento
• En lo alto vive, en lo alto mora, en lo alto teje la tejedora: la araña
• Es una arquita muy chiquitita, blanca como la cal, todos la saben abrir, pero nadie la sabe cerrar: el huevo
• Si me tiran por el suelo ya no hay quien me recoja, y el que quiera sostenerme es seguro que se moja: el agua
• Pérez anda y Gil camina, tonto será el que no lo adivina: el perejil
• No lo parezco y soy pez, mi forma refleja una pieza de ajedrez: el caballito de mar
• Más ligera que una hoja, toca el agua y no se moja: la sombra
• ¿Qué es lo que es algo y a la vez nada?: el pez
• ¿Qué es lo que se compra para comer, pero que nunca se come?: el tenedor
• Cien amigas tengo, todas sobre una tabla, si no las tocas, no te dicen nada: el piano
• Sin ser taza, tengo el asa; sin ser música, tengo el do; el fuego que a muchos mata, a mi me vuelve mejor: el asado
Las adivinanzas contribuyen a la difusión de las tradiciones populares, cuéntaselas a tus hijos y transmíteles su riqueza y musicalidad.