Es bueno que los niños tengan pequeñas obligaciones en las tareas domésticas
De pequeños a los niños les gusta mucho ayudar a mamá a colgar la ropa o jugar a imitarla cuando pasa un paño para quitar el polvo, pero a medida que son más grandes, para muchos padres es una luchar lograr que sus hijos ayuden en casa y se repartan las tareas domésticas.
Ayudar en las tareas del hogar es parte de la responsabilidad de los hijos y los padres no deben evitar asignarles las tareas sino habituarles a hacerlas y fomentar su autonomía.
Cuando deben comenzar a ayudar en las tareas domésticas
A partir de que tiene 5 ó 6 años el niño ya puede ir responsabilizándose de alguna acción en casa. Debemos empezar por hacerles cargo de cosas sencillas como llevar su ropa sucia al cesto correspondiente, recoger sus juguetes o ayudar a poner la mesa.
Cada año se puede ir incrementando las responsabilidades en casa, como hacerse la cama o mantener limpia su habitación.
Labor de los padres
Nadie nace sabiendo por lo que al principio los papás deberéis de ayudarle y enseñarle, poco a poco vuestros pequeños lo irán interiorizando y lo harán sin necesidad de pedírselo.
Al principio, si no lo hacen bien, no le reprendas, muéstrale de nuevo cómo se hace y dónde están los errores que ha cometido.
Hacer las tareas domésticas no debe ser un castigo, son una labor en familia, que ellos vean que tú también las haces. Podéis hacer semanalmente una lista de tareas y poner responsables, al final de la semana ver quién ha cumplido y quién no.
Elogia su buen trabajo, pero nunca recompenses sus tareas domésticas con dinero, eso no promueve la colaboración en casa.
No discrimines a tus hijos por razones de sexo, tanto los niños como las niñas deben ayudar en el funcionamiento de la casa y responsabilizarse de tener su cuarto limpio y su ropa ordenada.
Los adultos deben transmitir a los niños hábitos de autonomía y responsabilidad, solo así su desarrollo social será correcto.