Las fiestas Navideñas ¿qué celebramos?

Esta es la época del año que más luz hay en calle y en la mayoría de hogares. Sobre todo, en aquellos hogares en los que viven niños ya sean pequeños, medianos o  grandes.

El árbol de navidad, los adornos que embellecen sus ramas o embellecen las puertas y ventanas de las casas acompañados de luces de colores que seguro también iluminan el belén o el nacimiento del niño Jesús.

Luces y adornos acompañados de risas y mucha ilusión. La ilusión y la alegría con la que los niños viven  estas fiestas y que contagian a todos los que estamos cerca.

Una alegría que llena de luz todo el hogar.

Celebramos con luz los vínculos familiares

Y es que en estas fechas navideñas, la tarjeta de crédito y la masiva compra de juguetes o de regalos, nos hace olvidar o ni tan siquiera querer saber, que en estas fechas lo que realmente celebramos es el reconocimiento de los vínculos familiares.

Noche Buena y Navidad vamos a casa de unos y a casa de otros para comer y beber copiosamente e intercambiarnos regalos materiales ya sea  porque los ha traído Papá Noel o el  Tió (de donde yo vivo, en Cataluña).

Pero el verdadero motivo del encuentro, de la celebración, de estar sentados todos juntos alrededor de la mesa con sabrosa comida y bebida es la luz del amor, de los lazos afectivos entre los seres humanos.

Esos vínculos que desde nuestro primer instante en este mundo nos ayudaron a sobre vivir, a crecer y a ser quienes somos ahora.

Por eso en estas fechas también se echa mucho de menos a quienes fallecieron, pero la luz de nuestro amor por ellos, de las velas de la mesa, las luces del árbol de Navidad  y de los Belenes, también iluminan sus almas.

Los vínculos afectivos, las relaciones familiares, los lazos que nos unen entre padres e hijos, hermanos, abuelos, nietos, sobrinos, primos son el verdadero motivo de celebración pues es la verdadera  luz que ilumina nuestro camino.

No dejemos que el consumismo nos ciegue de más superficialidad y no nos deje ver esa verdadera luz para que podamos mostrársela a nuestros hijos.