Cómo ayudar a superar los miedos que impiden dormir
Las pesadillas y los miedos nocturnos son una preocupación para muchos padres y madres que no saben como afrontarlas y menos en medio de la noche luchando contra el cansancio físico. Para ilustraros mejor este tema, os comparto un relato que me escribió una madre no hace mucho:
“Nuestra hija se despierta a la noche con pesadillas y a pesar de que intentamos calmarle, ya no quiere dormir para no volver a soñar. Como no quiere dormirse de nuevo, a pesar de que se mete en su cama y te dice que se va a dormir, a los 5 minutos te llama porque quiere pis, agua, quiere que te quedes con ella en su cama, quiere ir a la nuestra, quiere levantarse ya... ¡ Se despierta con mil excusas! Como nos sentimos impotentes hacemos de todo y todo mal. Le terminamos amenazando, castigando sin dibujos al día siguiente pero nada resulta, cada vez va a peor.
Expresar mi miedo antes de ir a dormir
Es importante enseñar a los niños que expresen lo que sienten por la noche. Para esto buscaremos momentos tranquilos a lo largo del día, para hablar con el fin de que nos cuenten lo que sienten cuando tienen pesadillas, les podemos preguntar cómo identifican el miedo en su cuerpo y por qué necesitan llamar a papá y a mamá.
Con esto pretendemos enseñarles que para superar el miedo que sienten, deben tener confianza en sí mismos, mama y papa les pueden acompañar al principio pero en ellos está la fuerza para sobreponerse a ese miedo atroz que sienten.
¿Cómo me deshago del miedo antes de ir a dormir?
Para que los niños puedan conciliar el sueño poco a poco, se sientan tranquilos y no tengan ansiedad pensando en que cuando se duerman las pesadillas nocturnas los van a despertar, necesitan ser conscientes de que en ellos está la capacidad para hacer desaparecer ese miedo que les aterra. Para conseguirlo, os propongo la siguiente actividad con el fin de enfrentarles a lo que sienten y ayudarles a superar sus miedos:
- Para sacar fuera el miedo antes de ir a dormir podemos dibujar las cosas que le dan miedo en una hoja. Según la edad del niño, puede ser desde un monstruo hasta unos garabatos de distintos colores. No importa el dibujo, sea lo que sea debe representar el miedo que el niño siente por la noche quedando reflejado en una hoja de papel.
- Estos dibujos, que son su miedo dibujado, los vamos a romper en cachitos y los vamos a meter en una caja de tal manera que si se despierta por la noche, pueda recordar que sus miedos están metidos en esa cajita. Otra opción es deshacernos de ellos tirándolos a la basura delante del niño para que pueda ver que desaparecen.
Cuando el niño realiza una acción para enfrentarse a sus miedos, consigue aminorarlos, se hace fuerte, se siente capaz y dispuesta volverlo a intentar las veces que haga falta siempre y cuando cuente con el apoyo del adulto. Esto repercute en su autoestima y en la seguridad emocional que necesitará para enfrentarse a otros conflictos, superar otras dificultades o resolver problemas en la convivencia diaria.
Un juego para naturalizar el miedo
No me canso de recomendar los juegos de la Suscripción Premium de Edúkame para estos casos. Como bien sabéis, ofrece algunos contenidos para atender el miedo durante la infancia, una emoción que tanto bloqueo produce en los peques. Entre los materiales os recomiendo concretamente el juego Los monstruítos de los miedos. Este, a través de divertidas dinámicas en grupo o en familia, actividades que sirven para naturalizar la emoción y comprender mejor que todos tenemos miedos y que se trata de una emoción completamente normal.