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Nos hemos cambiado de país y la conducta de mi hijo ha cambiado

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Mi hijo de 3 años está empezando el colegio y estamos en un país cuyo habla no dominamos. Sé que debe ser fuerte para él ya que no entenderá lo que le indica su maestra y amigos, aparte por primera vez se encuentra con climas de baja temperatura. Su conducta ha cambiado está un poco más malcriado, se está haciendo pipí encima y siempre nos está llevando la contraria. Cómo hacer para ayudarlo a superar esta situación.

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Cristina Garcia
Pedagoga, Terapeuta infantil, Orientadora familiar, fundadora de Edúkame

Hola Ismael. Lo que tú llamas malcriado, me gustaría lo reflexionaras intentando percibir el interior emocional de tu hijo. Espero lo puedas ver de otra forma y así  seguro ayudarle. Si te quedas con la etiqueta de “malcriado” no podrás avanzar mucho.

Hacerse pipi encima es una manera de llorar. Llora por abajo lo que no está llorando por arriba. La pregunta podría ser ¿por qué no expresa con lágrimas, con llanto sus sentimientos?

Si ahora os lleva más lo contraria también es una manera de expresar su contradicción interior: seguro que se siente inseguro, tiene miedo, son demasiadas novedades y no está preparado para asumirlas.

Muchos cambios en su vida

Está viviendo un momento de cambio muy grande para él:

  • Empieza a ir al colegio y creo entender que hasta ahora no iba. Con lo cual, es nuevo para él estar en un espacio con muchos más niños, con unas normas y límites nuevos, con una maestra de referencia que no conoce mucho y que además, deberá compartir constantemente con otros niños.
  •  Además está en un hogar nuevo, con espacios diferentes, en país nuevo, con un clima nuevo, idioma nuevo, amigos nuevos...

Tiene muchos motivos para estar triste y llorar: dejó su hogar, su habitación, su barrio, tal vez también ha dejado atrás familiares importantes. En definitiva, lo que él conocía hasta ahora y que le daba protección y seguridad ya no lo tiene.

Tiene muchos motivos para estar enfadado y rabioso e intuyo que lo que realmente hay detrás de llevaros la contraria es que se siente inseguro y desprotegido.

 ¿Qué podéis hacer? Hablar, compartir, dibujar.

  1. Habla con él sobre cómo se siente en este nuevo lugar: ¿Qué te gusta?,  ¿qué no te gusta? ¿qué te hace sentir bien?, ¿y triste? ,¿y enfadado? , ¿qué echas de menos de antes?
  2. Compartir con él vuestros sentimientos, pues seguro que para vosotros el cambio también os supone dudas, inseguridades, tristeza. Por ejemplo “yo también echo de menos mi habitación de antes; a mi cuesta acostumbrarme a pasar tanto frío, echo de menos a los abuelos, me enfado cuando no entiendo el nuevo idioma”… Si tu le abres tu corazón, le estas dando permiso para que él pueda expresar lo que siente, y si encima le permitís llorar, mucho mejor.
  3. El dibujo es una herramienta fantástica donde los niños pequeños expresan su mundo interior. Podéis dibujar en diferentes momentos, con diferentes técnicas (lápices, pintura, rotuladores, hojas blancas, de colores,…):
  • las cosas, personas, lugares, objetos, que echáis de menos,
  • las cosas nuevas que os hacer reír, os gustan,
  • las cosas nuevas que no os gustan, os hacen enfadar.

A veces podéis hacer dibujos juntos (eso sí, cada uno el suyo), y en otros momentos le puedes pedir que dibuje el solo alguno de estos temas. Sus dibujos serán sencillos, como garabatos para ti, pero su significado es profundo. Cuando acabe pídele que te lo explique, así irás conociendo cómo se siente y él irá sacando hacia fuera lo que le duele interiormente.

Que estos dibujos sirvan para adornar durante una temporada algún lugar (pared, nevera, puerta,) del nuevo hogar.

 Su conducta expresa su estado interior

Yo estoy segura que tu hijo en estos momentos no se comporta como un malcriado, sino que a través de su conducta os está pidiendo ayuda.

Seguro que antes de dejar su antiguo hogar no ha podido despedirse de él ni tampoco le habéis hecho partícipe de la mudanza. Pero como veis, si que está sintiendo como un terremoto emocional el cambio. Y seguro que vosotros también lo estáis viviendo así, aunque  la responsabilidad de tirar para adelante os esté silenciando su expresión.

Ah! Y para tu hijo no será mucha dificultad el nuevo idioma, lo niños pequeños tienen una capacidad sorprendente de entender, interpretar y aprender un nuevo idioma. Seguramente, tú y mamá necesitaréis más tiempo que él para aprenderlo.

 

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Cristina Garcia

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