Educar a los niños y a las niñas hacia la igualdad

Dijo alguien que si quieres mejorar el mundo empieces a hacer pequeños cambios en tu entorno más cercano. Coeducar es una buena forma de empezar a hacerlo. Con pequeños gestos enseñaremos a nuestros hijos e hijas a sostener una sociedad donde se de una igualdad real entre sexos.

Qué es coeducar

Coeducar es poner toda nuestra intención en dar a ambos sexos una educación en igualdad, plena convivencia, respeto entre iguales y admiración mutua.

Pero es mucho más, significa apostar por un futuro con tolerancia cero a la violencia de género, sin necesidad de madres superwoman porque se de un reparto equitativo de las tareas domésticas y cuidado de las personas dependientes, sin adolescentes atormentadas por ideales de belleza imposibles de alcanzar,  por niños y hombres que pudan expresar su sensibilidad, sus emociones sin miedo a ser tachados de pocos masuculinos,  y sin limitación de actividades para uno u otro sexo más allá que el de los gustos personales.

¿Cómo podemos coeducar en casa? Aunque es un tema que da para mucho, bastaría con que cada uno de nosotros siguiera en su casa estos tres pequeños gestos:

Coeducar con el ejemplo

No podemos olvidar que los pequeños aprenden más con nuestro comportamiento que con nuestras palabras. Es importante por ello conseguir que en familia se respire respeto y admiración mutua entre hombres y mujeres así como un reparto de tareas equitativo.

Una actividad interesante al respecto sería repartirnos las tareas de la casa entre todos los miembros de la unidad familiar sin tener en cuenta el sexo. Es importante incluir en el reparto también a l@s menores adjudicándoles tareas acordes a su edad.

Cuidar lo que ven en la televisión

Es importante colocarse las gafas de género para ser capaces de ver qué modelos masculinos y femeninos se ven reflejados en los dibujos y series que ven nuestros hij@s.

En edad infantil debemos seleccionar qué es lo que ven pero conforme crecen es tarea fundamental el sentarnos a su lado y hablarles de aquello que estamos viendo.

Con los juegos y juguetes aprenden

Respetando los gustos de los niñ@s y evitando los prejuicios que dictan que el pertenecer a un sexo te condiciona a jugar con unas cosas y no con otras. No olvidar que a través del juego los pequeñ@s aprenden que pueden desarrollar gran variedad de actividades. El no limitarles implica que amplíen sus expectativas de futuro y crezcan sus oportunidades.